jueves, 5 de febrero de 2015

ADOREMOS JUNTOS

Adoremos juntos
Una relación con Dios puede ser una experiencia privada y personal, pero gran parte de la adoración es para llevarla a cabo en comunidaed. Dios es una comunidad en sí mismo (Padre, Hijo y Espíritu Santo), y su Palabra nos alienta a reunirnos con otros creyentes para animarnos unos a otros, orar juntos y recordar el amor del Señor por nosotros. Después de la crucifixión, la muerte y la resurrección de Jesús, las dinámicas de la adoración en comunidad cambiaron drásticamente. Los sacrificios de animales ya no eran necesarios para restaurar una relación con Dios. La sangre de Jesús, derramada como un sacrificio voluntario, ahora tiene el poder de quitar los pecados de todos los que se arrepienten y lo reciben.

No hay comentarios:

Publicar un comentario